Salimos
con retraso por la mañana, y tuvimos poco tiempo para hacer la escala en
Franfurt.
Después
de unas 15 horas de viaje llegamos a las 6h30 del 3 de noviembre hora oficial
de Beijing. Todavía cogeríamos un avión
más hasta Guilim. No teníamos mucho tiempo para el transbordo así que nos
tuvimos que esmerar con los carteles en chino.
Al final las tres horas que dejamos para el cambio de avión fueron suficientes
y al mediodía ya estábamos en Guilin. Del aeropuerto cogimos un bus público
hasta el centro por 20 yuan por persona. Fuimos a una de las zonas turísticas
principales, cerca del muelle, ya que al
día siguiente pensamos salir temprano para bajar por el río Li hasta Yangshuo.
El hotel estuvo muy correcto, unos 268
yuans, seguro que habrá mejores y más baratos ,
pero después de un día viajando cualquier precio nos parecía adecuado.
A la
tarde aprovechamos para contratar en una agencia el descenso en barco del rio Li.
Aquí hay que tener en cuenta que hay dos precios uno para chinos y otro para guiris, 280 y 450 yuans respectivamente. La única
diferencia es que el guía habla inglés o no.
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